miércoles, 10 de octubre de 2007

En doble fila

"De pronto se desperto, algo le decia que no iba bien. Tal vez fuera ese mareo, o la opresion que sentia en su hombro, junto con la levedad de sus pies que parecian flotar. Tal vez fuera que donde normalmente estaba el cielo veia tierra removida, hierba arrancada y trozos de cristal, tal vez...
Empezo a recordar, el dolor ayuda, las noches sin dormir, las prisas, los kilometros, se dio cuenta de algo, echa mano a la cadera y logra tantear el pulsador, la gravedad le devuelve a la realidad rapidamente en forma de golpe contra el techo, que, paradojicamente, ahora es el suelo. Milagrosamente, tal vez sea en su cabeza, la música sigue sonando, un tal Gonzalez canta algo de sandwiches en una gasolinera, no sabe que de Buenos Aires o Antequera. Finalmente logra orientarse, se arrastra, se incorpora y observa su coche volcado. Bueno, podria ser peor... piensa De pronto oye ¿Estas bien? mientras le contemplan desde el fondo de unos ojos negros. Si, responde, claro que si...."


Tranquilos que no me ha pasado nada es solo ficcion.

1 comentario:

Anónimo dijo...

discazo que se ha sacado de la manga... lleno de vida nocturna, de faros de coches, de barras de clubs y de mordiscos, de averías, y de redenciones...

y genial cómo enlazas la temática

un saludo